miércoles, 31 de mayo de 2017

Mi perro mendiga comida mientras comemos. La solución en 4 simples pasos 




A pesar de ser un mal habito, que a la mayoría nos molesta especialmente cuando tenemos visita en casa, es algo que retroalimentamos nosotros mismos. Si nunca ofrecemos comida en la mesa mientras comemos, el perro no la pedirá, puesto que sabe que no servirá para nada.

La cuestión es, si lo hemos hecho mal desde el principio…¿Tiene solución?

Obviamente, el esfuerzo es mucho mayor para reeducar una mala conducta que haberlo educado cuando era un cachorro, pero la solución es muy fácil si sigues rigurosamente los siguientes consejos:

El perro nunca recibirá comida mientras nosotros comemos. Ni mucho, ni poco. Simplemente nada. Aunque el trozo que le demos sea muy pequeño, el refuerzo es el mismo. He escuchado en muchas ocasiones…”no le doy nunca, pero hoy es un día especial…” Debéis saber que eso refuerza aún más la conducta por la incertidumbre que genera. A ésto se le llama “refuerzo variable”.

Debemos ir todos a una. Llegar a un acuerdo entre todos los miembros de la familia será la clave del éxito. Como indicaba en el punto anterior, que el refuerzo sea intermitente, crea más frustración y por tanto más ganas.

El animal siempre debe comer su pienso cuando nosotros hayamos terminado. Este gesto nos ayudará a marcar la jerarquía. En una manada de perros, el más fuerte comerá el primero y así sucesivamente según su rango jerárquico.

Nunca dar las sobras. Si le damos un premio cuando hemos terminado, se pasará toda la comida nervioso y observándonos fijamente cerca de la mesa. El método que estamos utilizando para eliminar esta conducta es “La extinción”. Por tanto, cualquier refuerzo positivo que reciba, será suficiente para retroceder en el aprendizaje.
Ahora sólo queda llevarlo a la práctica! Como siempre, os animo a que compartáis con nosotros vuestra experiencia dejándonos un comentario.

martes, 30 de mayo de 2017

Las 10 irresponsabilidades más comunes de los propietarios de perros


En numerosas ocasiones, me encuentro barbaridades en las numerosas consultas que me hacen los usuarios. Muchas veces doy por sentado cosas que se dan por lógicas, sin embargo, he agrupado en 10, las preguntas que más me han indignado estos últimos meses y, por tanto, podríamos decir las irresponsabilidades más comunes en propietarios de perros.

1. Las relacionadas con la salud física del perro. Hace dos días me llegó este email (copio y pego): “Hace dos días mi perro de 3 años y medio fue atropellado por un auto y no quiere comer, ni beber y ni se levanta de la cama. Siento que va a morir. ¿Qué puedo hacer?

” Es obvio que mi respuesta es llevarlo urgentemente al veterinario, sin embargo, me pregunto: ¿Por qué esta persona no lo hace? Mi lógica me dice que en el momento del atropello se lleva al perro inmediatamente al veterinario. Aunque visiblemente no tenga nada, ¿quién nos dice que por dentro no tenga algún órgano dañado? Por favor, ante cualquier duda sobre posible dolor o sufrimiento del perro, el veterinario es el mejor aliado: ni buscar en Internet, ni esperar una respuesta de nadie ni esperar a que obre un milagro con el perro.

2. Tener jardín, y por ello, no sacar al perro. Esto es tan simple, como ponerse en el lugar del perro. Si a ti, como propietario de perro te hicieran lo mismo, y durante toda tu vida estuvieras confinado en un jardín o en una finca de 10.000 hectáreas… ¿te gustaría?. Hay que tener claro que el perro es un animal muy social, y que es nuestra responsabilidad sacarlo a pasear, a relacionarse con otros perros y personas, a que huela nuevos aromas, a que explore nuevos territorios, a que haga otro ejercicio que el de estar dando vueltas por los mismos sitios, etc. Si no lo hacemos, nuestro perro mostrará claros síntomas de ansiedad: ladrará en exceso, tendrá apatía continua, aullará, se escapará de casa en cuanto pueda, etc.

3. Adoptar un cachorro y cansarse de él a los dos días. Esto pasa en la mayoría de las adopciones: se adopta un cachorro y como se dan cuenta de que es un ser vivo y que se orina por todo, a lo mejor se come sus heces, muerde todo lo que pilla, etc. se devuelve, se abandona o se sacrifica. Es la lacra de esta sociedad: el uso de los animales como si fueran mercancía, como si fueran seres inertes que ni sienten ni padecen. Hay que adoptar con amor, pero sobre todo, con responsabilidad. Sabiendo de antemano que nos va a suponer un esfuerzo de educación, paciencia y perseverancia. De lo contrario, mejor comprar un peluche.

4. No tener tiempo para el perro. El perro necesita tiempo: es un ser que va a depender totalmente de nosotros. Hay que alimentarlo, cuidarlo, llevarlo al veterinario, pasearlo diariamente, jugar con él, interactuar con él,… igual, igual que si fuera otro miembro de la familia. Porque sencillamente, lo es. No podemos adoptar un perro y tenerlo más de 8 horas solo, o bajarlo a la calle solo para hacer pipí y volver a casa… ¡Ponte en su lugar!

5. Ser incívico. Por culpa de muchos propietarios, los perros son odiados por mucha gente: porque se encuentran heces por todos lados, porque encuentran rincones empapados de orina con el olor que aquello desprende, porque los llevan sin correa y muchas veces se tiran a las bicis, porque los dejan encerrados en balcones y se pasan el día ladrando… Un poco de civismo, por favor.


6. No esterilizar a la perra. Es una irresponsabilidad tremenda. Descartemos el mito de que hay que hacerla criar por lo menos una vez en la vida, descartemos aquello de que es antinatural, descartemos aquello de que lo va a pasar mal o de que va engordar… ¿hola? Las únicas perras que deberían criar son las de criaderos profesionales. La esterilización son todo ventajas: previene enfermedades, previene embarazos psicológicos, previene embarazos no deseados, y sobretodo, previene el sacrificio de miles y miles de perros y cachorros sin hogar que han estado esperando una oportunidad.

7. Adoptar una raza “porque me gusta”. Recordemos que los perros no son una mercancía. La mayoría de personas adopta una raza por capricho. Mira este email: “Te escribo desesperada con mi Schnauzer. No sé qué hacer ya con ella. He cogido un poco de depresión y todo porque llevaba muchísimos años tras esta raza de la que llevaba enamorada desde pequeña, pero ¿puede que esté loca? No para en todo el día, no me hace nada de caso, lo rompe todo: he tenido que cambiar el sofá, me ha roto la alfombra, rasgado la puerta, no quiero deshacerme de ella pero me supera, realmente me supera. Yo no sabía que un perro era esto.” Tras hablar con ella, quedó claro que esta persona tenía una vida muy sedentaria y había escogido una raza muy activa. Dos caracteres confrontados que resultaba en problemas de ansiedad por ambas partes. La raza de este perro no era para ella. Entonces, una de las mayores irresponsabilidades es escoger la raza por capricho, sin tener en cuenta, cómo es esta raza y qué nivel de actividad física requiere.

8. Educar al perro por inercia. La mayoría de gente se piensa que educar a un perro es fácil. Y lo es, pero si se sabe cómo. Y las consultas que más me molestan y me duelen son las que me sueltan: “mira que le pego, pero no hay manera“. Los propietarios utilizan la educación humana, en la que muchos utilizan la violencia para ello, en vez de la educación canina. Ser humano y perro son dos especies muy diferentes, que requieren de la aplicación de una psicología diferente. No nos esforcemos en educar según nuestras convicciones o creencias porque no lograremos ni buenos resultados ni un perro feliz.


9. Cumplir con los mínimos requisitos legales. Dar de alta el perro en le censo, cumplir con las vacunas, ponerle el chip, colocarle una plaquita en el collar… Nos ahorraremos que, si nuestro perro se perdiera, se pierda para siempre. Con el chip y la plaquita nos podrán localizar rápidamente.

10. “Si solo es un perro”. Esta afirmación me enciende y me insulta. Solo es un perro. Pues menos mal que solo es un perro. Y si es solo un perro, ¿para qué tienes perro?. Si no sabes ni quieres ser responsable con el perro, no tengas perro. Si cada propietario de perro supiera los sentimientos que llega a tener un perro, ni se le pasaría por la cabeza soltar esta frase. El respeto por un perro comienza mucho antes de adoptarlo: empapándose de información sobre sus necesidades.

lunes, 29 de mayo de 2017

Conoce las distintas caras de los gatos. ¿Qué significan? 


Los gatos son considerados animales inexpresivos y misteriosos. Mientras que un perro nos puede decir lo que siente en cada momento a través de movimientos de cola u otro tipo de lenguaje corporal, los felinos son un poco más difíciles de entender. No obstante, sus caras y gestos en estas nos pueden decir mucho de ellos. ¿Te gustaría saber qué significa cada una de ellas? Estudiemos las caras de los gatos.

¿Por qué es importante interpretar las caras de los gatos?

Muy simple: es su modo de comunicarse. Debido a que no pueden hablar, los gatos utilizan posturas y caras para decirnos cómo se sienten.

Aunque los gatos parecen totalmente inexpresivos, su rostro nos puede decir muchas cosas. No es suficiente con observar su cara, tenemos que observar también sus pupilas, sus orejas y sus bigotes.

Estas son las caras de los gatos más comunes
Sin más dilación, aprendamos a observar a nuestro gato y diferenciar qué sentimientos o sensaciones está teniendo.

Un gato relajado
Cuando un gato está relajado es fácil de diferenciar, pues su cabeza estará apoyada sobre una superficie o sobre sus patas delanteras. Normalmente tendrá los ojos medio cerrados y sus pupilas anchas y relajadas.



Sus orejas y bigotes tendrán una posición normal y es posible que además emita un leve ronroneo.

Gato en alerta
Esta cara se puede confundir con la de gato interesado en algo. Su cabeza se moverá lentamente de un lado y sus pupilas estarán casi normales, aunque con los ojos muy abiertos.

Sus bigotes se irán un poco atrás, aunque se presentará un poco tenso, y es posible que maúlle.

Gato tenso
Cuando un gato está tenso su cabeza se pega al cuerpo pareciendo que su cuello se redujera. Por norma general no mueve la cabeza y los ojos se mantienen bien abiertos y parecen unirse debido a la tensión.


Sus pupilas se dilatan, aunque no es demasía.

Gato estresado
Cuando un gato está estresado, cosa que puede pasar muy fácilmente si se les cambia sus rutinas, su cabeza se baja y sus pupilas crecen al máximo.

Un gato estresado puede volverse agresivo e incluso a atacar a otros mininos o mascotas de la casa. Normalmente no ronronea o guarda silencio o maúlla en tono víctima.

Un gato miedoso
Hay muchas cosas que asustan a los gatos, por lo que esta cara puede que sea una de las que más verás en tu felino.

Sus ojos se abrirán y sus pupilas se dilatarán por completo. Sus orejas se verán como aplastadas y buscará tu regazo o un lugar donde esconderse.

Cara de un gato que se siente ante una amenaza
Los gatos creen aquello de que “no hay mejor defensa que un buen ataque”. Por tanto, un felino que sienta que algo lo amenaza, va a responder de forma agresiva. Su cara estará con un gesto de pocos amigos, sus orejas en línea recta hacia los lados e intentará atacar.

Sus pupilas y sus ojos estarán muy abiertos.


Conocer las caras distintas que nuestro gato puede poner nos ayudará a conocerlo mejor y a poder evitar situaciones que lo molesten o le causan temor.

Observar a nuestro minino es clave para entender el lenguaje que quiere transmitirnos, y eso favorecerá la buena convivencia entre ambos. Por mucho que intentemos que entiendan nuestro lenguaje y que nos transmitan lo que sienten, esta es la única forma que tienen de hacerlo.

Dedica tiempo en observar a tu gato para que puedas entenderlo mejor y saber por qué reacciona de una forma u otra ante diversas situaciones. Merecerá bien la pena el tiempo que inviertas en ello. Y con estos tips que te dimos, ahora lo tienes aún más fácil.

viernes, 26 de mayo de 2017

Los perros no ven en blanco y negro ¿Sabes cómo ven? 




¿Todavía crees que los perros ven en blanco y negro? Muchos de vosotros ya sabéis que no es así, pero hoy os contaremos cuáles son las tonalidades que pueden apreciar y la nitidez de la imagen.

Como punto de partida, debéis saber que nuestra gama cromática es triple (rojo, verde y azul) y a partir de ellos se desarrollan el resto de los colores y sus distintas tonalidades. Sin embargo, los colores base de los perros son dos (amarillo y azul) y la mezcla de ambos amplía el abanico de colores y sus tonalidades, pero sin ser posible apreciar ni el rojo, ni el verde.

Además, les es muy difícil apreciar las distintas tonalidades sobre todo de grises así como la luminosidad y las sombras.

Por otro lado, la nitidez de su imagen es bastante escasa, aunque tampoco les hace falta ya que tienen mucho más desarrollado el sentido del olfato. La nariz del perro contiene entre doscientos y trescientos millones de receptores olfativos, frente a los cinco millones que contiene el humano. Por ello, siempre se dice que el perro mira el mundo por la nariz.

Teniendo en cuenta todo lo anterior expuesto, aconsejo que, a la hora de elegir un juguete, que sea preferiblemente amarillo o azul ya que el rojo, el rosa, el verde… les costará más reconocerlos.


Para comprobarlo por vosotros mismos, podéis bajaros una aplicación llamada Dog Vision pinchando éste enlace:

https://play.google.com/store/apps/details?id=fr.nghs.android.cbs.dogvision&hl=es

¡Mediante ésta aplicación podéis tomar fotos y comprobar cómo se ven desde el prisma de tu amigo!





jueves, 25 de mayo de 2017

Biorritmos caninos: la hora de pasear a tu perro es importante


Los biorritmos caninos o ritmos biológicos son las actividades que vienen programadas genéticamente en nuestro perro. Suponen el día a día de lo que nuestro perro debe y necesita hacer.

La evolución del ser humano ha hecho que nuestras rutinas estén marcadas por un tiempo que puede no asemejarse al tiempo que nos marcaría nuestro reloj biológico. Lo que olvidamos es que a pesar de estar adaptados a rutinas muy diferentes, nuestro reloj biológico sigue existiendo y funciona de igual manera, sigamos sus “indicaciones” o no.

Es importante saber que un ser vivo adulto sometido a la privación sensorial o aislamiento de manera prolongada (aislarle de sensaciones lumínicas, térmicas ni estacionales naturales) es capaz de mantener sus biorritmos gracias a la actividad neurológica del hipotálamo, más conocido como el reloj biológico. Esto quiere decirnos que aunque ignoremos nuestro biorritmo natural y el ser humano esté capacitado para ello, este sigue en funcionamiento influyendo en nuestra vida.

Los biorritmos naturales de cualquier animal son tremendamente importantes. Debemos tenerlos en cuenta a la hora de marcar una rutina en dicho animal, en nuestro caso los perros.

Los perros no perciben el mundo de la misma manera que los seres humanos. Ellos no están tan capacitados a adaptarse a un biorritmo que no sea el suyo natural. Muchos de los problemas de conducta en los perros hoy en día pueden estar muy influenciados por realizar actividades vitales caninas fuera de lo que su reloj biológico les está diciendo.

Adaptar una rutina de actividades a su biorritmo natural puede ayudarnos a mejorar su calidad de vida.

BIORRITMOS CANINOS

De manera muy simple, podemos hablar de 3 picos importantes de actividad en el día a día de nuestro perro marcado por su reloj biológico:

A primera hora de la mañana El primer paseo de nuestro perro no debería ser a las 12 de la mañana. Debe ser al amanecer. Y no un paseo de 10 minutos, sino un paseo como dios manda. Es cuando muchos animales diurnos empiezan a realizar actividades propias de su especie. Entre esos animales estamos tanto los perros como nosotros mismos.

¿No os acordáis de la hora a la que se levanta la abuela? Eso de “a quien madruga, dios le ayuda” y otras frases como que “madrugar sienta muy bien”

Al medio día Es verdad que al medio día el pico de actividad no es tan intenso pero también debe realizarse un paseo. Eso sí, un poco más ligero que el de por la mañana.

A última hora de la tarde Antes de que anochezca debido a la falta de luz y que nuestro perro de noche no ve bien. Este paseo también debe ser de intensidad más alta. Como buenos animales diurnos que somos, cuando cae la noche es hora de ir a buscar refugio y descansar.

También es importante la raza de nuestro perro a la hora de planificar una rutina. Los perros pastores tienen picos de intensidad más elevados ya que son perros preparados para realizar actividad durante más horas.

En perros con problemas graves de conducta, marcar una buena rutina teniendo muy en cuenta sus biorritmos naturales puede ayudarnos mucho a avanzar en su recuperación.

En resumen, tener en cuenta los biorritmos naturales de nuestro perro debería ser algo importante si queremos darle toda la felicidad que se merece. Sobre todo debemos tenerlo en cuenta con perros de ciudad donde sus biorritmos y los de su dueño no coinciden.

martes, 16 de mayo de 2017

Caspa en gatos: su causa y tratamiento


La caspa en los gatos indica que su piel no está del todo saludable. Esta se presenta seca y con escamas produciendo una gran picazón a nuestras mascotas.


¿Cuáles son las causas de la caspa en los gatos?

Antes de eliminar la caspa en los gatos debe detectarse cuál es su causa. Las causas más comunes son:

Sequedad de la piel: si la piel felina no tiene la suficiente hidratación proveniente del agua que bebe, los alimentos o el ambiente, suele producirse caspa en los gatos.
El sobrepeso es otra de las causales de la caspa en los gatos. El sobrepeso hace que tu mascota no pueda asearse debidamente. En estos casos la caspa aparece en la parte alta del su lomo, y en la parte baja de la cola. Lugares que se tornan inaccesibles para él.

Los ácaros estos se denominan caspa caminante, y está causada por los cheiletiela o cheyletiella. Estos tienen apariencia de caspa pero en realidad son ácaros y bastante contagiosos por cierto. Este tipo de ácaros se elimina con champús especiales, en caso de que tu gato la tenga, es conveniente que hagas una consulta con el veterinario.Tratamientos de la caspa en los gatos

Descartadas las causas medicas motivo de la caspa en los gatos, para eliminarla debes:

El colocar un humidificador que incremente la humedad en el ambiente donde tu gato se encuentre más frecuentemente, puede eliminar la caspa en los gatos.Incluye a la dieta de tu gato suplementos vitamínicos que contengan omega-3 o aceite de pescado.Pídele al veterinario que te recomiende un muy buen alimento para gatos con lo que su piel se humecte debidamente.

Si tu gato consume pienso seco, añade a su alimento un poco de comida húmeda, eso hará que su piel deje de estar tan seca.Un muy buen cepillado diario ayudará a eliminar la caspa en los gatos.

viernes, 12 de mayo de 2017

¿Por qué vomitan los perros? Causas y remedios


Hay diferentes razones por las que los perros pueden vomitar. Tal vez porque comió algo que no debía o comió demasiado o tal vez podría ser un síntoma de un problema serio.

Entonces, ¿Por qué vomitan los perros? El estómago de un perro puede contener cierta cantidad de comida y agua a la vez, por lo que hacer cambios en sus horarios de comida puede ser la opción para evitar que vomite, pero tal vez el problema no sea la comida por lo que debe recibir atención veterinaria preferiblemente.

Post relacionado: ¿Por qué se les cae el pelo a los perros?

¿Por qué se producen los vómitos en los perros?

Por lo general, los perros vomitan cuando comen demasiado, sin embargo el vómito también puede ser síntoma de una condición médica seria.

Es importante conocer las causas por las que un perro vomita, debido a que puede provocarle deshidratación y problemas intestinales y peor aún fallas en algunos órganos vitales, por lo tanto se debe actuar inmediatamente y llevar al perro al veterinario, si ha vomitado más de dos veces en una hora.

Las razones por las que tu perro podría vomitar son las siguientes:

mi perro vomita espuma blanca


1- Parásitos intestinales: Estos pueden causar vómito en cachorros y perros adultos. Ellos también pueden tener influenza, causándoles vómito.

2- Exceso de ácido estomacal: Si vomita un líquido amarillento o bilis después de comer, podría deberse a una sobreproducción de ácidos estomacales.

3- Intolerancia a su comida:

Si se le hace algún cambio en la comida, también puede causarle vómito, producto de alguna intolerancia a sus ingredientes, como sal, pescado, carne, cerdo o trigo pueden causarles intolerancias.

4- Césped: Algunos perros se comen el pasto o hierba de los patios y jardines. Normalmente no vomitan luego de hacerlo, pero si comen de más puede que esto ocurra.

5- Objetos: Algunos perros se comen la basura, animales muertos, y otros objetos, lo que puede perjudicarlos y a veces puede ser muy peligroso.

6- Comida de humanos: Nunca deberían comer alimentos de humanos, estos suelen tener más contenido de sal o azúcar y no solamente les causan vómitos sino que también pueden ocasionarles graves enfermedades.

7- Comer o beber en exceso: Es muy común en cachorros y en perros pequeños porque si comen rápido o mucha cantidad en poco tiempo, pueden vomitar inmediatamente.

8- Enfermedades: Como la pancreatitis, diferentes tipos de cáncer, tumores, infecciones bacterianas, pueden ocasionar vómitos, por lo que siempre se debe observar al perro si presenta algún síntoma y por supuesto llevarlo inmediatamente al veterinario.

¿Qué hacer si mi perro vomita?

Si tu perro vomita, sin duda debes llevarlo al veterinario de inmediato. De ser algo sencillo, le recetará probablemente un antibiótico y reposo, pero si es algo serio, tendrá que quedarse en la clínica para recibir tratamiento incluyendo suero para evitar la deshidratación. Tal cual como las personas, jamás debes automedicar a tu perro con ningún fármaco, siempre se debe consultar a su veterinario.

tratamiento del vomito en perros



Si vomita frecuentemente en un día, se debe retirar cualquier tipo de comida, ofreciéndole pedacitos de hielo para mantenerlo hidratado, sin darle líquidos. Una vez que mantenga líquidos en su cuerpo podrá ingerir comida blanda como por ejemplo avena o un poco de arroz. Al desaparecer los vómitos totalmente se puede volver a dar su comida regular.

¿Cómo hacer vomitar a un perro?

Puedes provocar el vómito de un perro dándole agua oxigenada, le das 1 cucharadita (5 ml) por cada 5 Kg. De su peso corporal, se le puede dar en una jeringa de plástico para más facilidad. Camina con el perro durante unos minutos para que se mueva, y esto le ayudará a que haga efecto el agua oxigenada. Puede tardar aproximadamente unos 15 minutos. Si no vomita en esos 15 minutos, dale una segunda dosis. Si no lo logras aún llévalo de inmediato al veterinario.

El vómito en perros cachorros

Cuando un perro cachorro vomita, y sabemos que no ha comido algún objeto y actúa de forma normal, es probable que no necesite ningún tratamiento sino que se trate de algún malestar estomacal simple.

Pero si por el contrario vomita con sangre, tiene fiebre o presenta flemas, algún tipo de espuma blanca, el vómito es de color verde, o presenta espuma amarilla, puede tratarse de una gastritis y necesitará un tratamiento e incluso sueroterapia, y sin duda lo mejor es que lo vea un veterinario.




miércoles, 10 de mayo de 2017

Este deporte convertirá a tu perro en un campeón


Los animales también deben hacer ejercicio para no sufrir obesidad o diversas enfermedades, así como para reducir la ansiedad y encauzar todas sus energías. Por ello en el siguiente artículo te contamos sobre este deporte que convertirá a tu perro en un campeón.

Deporte para el campeón que tu perro lleva dentro


La disciplina se llama Obediencia Canina Internacional (O.C.I. por sus siglas). Como su nombre lo indica, se basa en diferentes ejercicios para demostrar cuál es el perro más obediente del mundo. Aquí no hay razas, tamaños ni edades, sino disciplina, amor y mucha práctica.

Este deporte comenzó en Colombia hace casi una década y en la actualidad se desarrolla por diversión o de forma profesional. La buena noticia es que mediante juegos puedes entrenar a tu peludo.

El evento en si de O.C.I. está regulado por jueces especializados y es preciso cumplir con un reglamento, el cual tiene como objetivo medir las habilidades de cada participante. Los concursos están divididos en diversas modalidades: en las categorías promocionales están los cachorros, los jóvenes y los del grado 0. En las categorías profesionales están los grados 1, 2 y 4.

Según los expertos, en disciplina y entrenamiento canino este deporte es de perfección y de precisión, y busca una armonía o simbiosis entre el animal y su dueño o entrenador. Dentro de las pruebas se pueden usar comida o juguetes como incentivo o premio, pero está prohibido maltratar a la mascota tanto dentro como fuera de la pista.

Obediencia Canina Internacional no exige a los participantes ninguna característica especial o de razas. Esto quiere decir que todos los canes pueden forman parte, incluso los “criollos”. El adiestramiento puede comenzar en los cachorros desde los dos meses de edad.



¿Cómo es el deporte que puede convertir a tu perro en un campeón?
Se trata de un circuito con diez ejercicios, los cuales incluyen permanencia (quedarse quieto por un determinado lapso), recuperación de objetos, ejercicios olfativos, caminar junto al guía sin usar correa, movimientos que exigen perfección (en las categorías más altas) y cambios de posición a distancia.


Dentro de la categoría promocional, por ejemplo, el reglamento cuenta con 6 ejercicios (todos tienen una puntuación máxima de 10 unidades):

1. Junto sin correa
El comando que debe se usado por el guía es “fuss”. El ejercicio se desarrolla en un cuadrado de 5 metros de lado. Se empieza con un recorrido a velocidad normal, sigue con dos giros a la derecha y dos a la izquierda, dos medias vueltas y dos paradas. Restan puntos las gestualidades, el doble comando, que el perro no adopte una posición o que su atención sea intermitente.

2. Echado en grupo
Los comandos son “Echado” o “Sentado”. Este ejercicio se lleva a cabo en un grupo de mínimo 3 perros y máximo 6. Todos comienzan sentados con sus guías a 5 metros delante de ellos. El juez ordena la posición a cada uno cuando sus guías se alejan 10 metros. Se restan puntos si el animal se levanta antes de la orden, si ladra, si intenta pelear con otros o si no llega hasta el guía tras la orden.

3. Control a distancia
Los comandos son los mismos que en el ejercicio anterior. El perro se sienta y el guía se aleja a 3 metros. Cuando el juez lo indica, el can debe cambiar de posición y dirigirse hacia él. A una nueva orden el peludo se debe quedar quieto.

4. Sentado en grupo durante 1 minuto

El comando es “sentado”, la ejecución se desarrolla con un mínimo de 3 y un máximo de 6 perros. Los guías quedan a una distancia de 5 metros y luego se alejan 3 metros más. En todo ese tiempo el animal no puede levantarse ni cambiar de posición. Se descuentan puntos por los mismos fallos del anterior ejercicio grupal.

5. Enviar al perro a una dirección
Los comandos en este caso son “Adelante”, “en pie”, “quieto” y “junto”. El ejercicio comienza con el perro en una esquina a 3 metros del guía, en posición parado. El entrenador irá dando las órdenes para que cambie de postura.

6. Sentado y echado
Los comandos son “sentado”, “echado” y “fuss”. El ejercicio se realiza en un cuadrado de 5 metros de lado con un cono por esquina. El guía le va indicando que se siente o se eche en cada rincón.

martes, 9 de mayo de 2017

Qué hacer si tu mascota es expuesta a gases lacrimógenos





Los gases lacrimógenos, perdigones y otras sustancias tóxicas tienen efectos desfavorables no sólo en las personas, también en el ambiente y en nuestras mascotas.

“Los animales tienden a ser más delicados que las personas. Los seres humanos tienen alrededor de cinco millones de receptores olfativos, mientras que los perros tienen alrededor de 200-300 millones. Es decir, su sentido del olfato es mucho más potente. Por ello, la exposición a gases tóxicos puede causar un mayor daño en ellos, ya que son mucho más sensibles”, explica Yoselyn Gutiérrez, médico veterinario de Maxipet.

Al igual que su sentido del olfato, los canes tienen una capacidad auditiva bastante desarrollada, y el sonido de bombas y perdigones tiende a causar daños psicológicos. Estas situaciones pudieran excitar al animal más de lo normal, propiciando que intente escapar del lugar o agrediendo a alguien que esté cerca.

REACCIONES A LOS GASES LACRIMÓGENOS:

Irritaciones intensas de los ojos, lo cual produce lagrimeo abundante
Hipersensibilidad a la luz, conjuntivitis o ceguera temporal
Irritación de la membrana de la nariz, tráquea y pulmones, lo cual puede producir secreción nasal, sensación de ahogo o tos
Sensibilidad del estómago con inducción del vómito y posible diarrea
Problemas de la piel con sensación abrasiva y dolorosa picazón
A su vez, las movilizaciones requieren estar en constante movimiento; esto podría generarle estrés a la mascota, que acompañado con el calor, aumenta el riesgo de tener un shock térmico. Estos episodios son más difíciles de estabilizar y puede causar la muerte del animal.

EN CASOS DE EMERGENCIA, SIGUE ESTAS RECOMENDACIONES:

Rociar una mezcla de bicarbonato de sodio con agua en el aire para así mitigar el efecto de los gases.
Humedecer muy bien su pelaje.
Es recomendable que una vez calmada la situación, bañes a tu mascota inmediatamente; ya que es necesario quitar cualquier residuo de los gases lacrimógenos.
Si estás en la calle, intenta alejar al animal de la situación. Llévalo a un lugar donde pueda estar seguro. Se debe tener cuidado en el momento de tomarlos, porque pueden sentirse amenazados por la situación y son proclives a morder.
Si estás en casa, es importante cerrar las ventanas y usar un ventilador o abanico que ayude a contrarrestar el flujo del gas.
Luego, llevar a la mascota a un chequeo médico, considerando que muchas reacciones alérgicas pueden no reflejarse externamente sino a nivel interno.
En caso de que el animal sea herido, se hace más importante la llevada al veterinario, para que se controle y se eviten infecciones.

lunes, 8 de mayo de 2017

Qué es la ansiedad por separación y cómo se soluciona 


Generalmente, los perros que sufren ansiedad por separación son animales muy vinculados a su dueño. No es extraño, por lo tanto, que sufran de ansiedad cuando se les deja solos. Las conductas que aparecen en este momento son diversas: masticación destructiva, ensuciamiento de la vivienda, ladrido incesante, excavación...

La ansiedad por separación puede ser, no solamente molesto y peligroso para el propietario (debido a las destrucciones producidas en la vivienda) sino también puede llegar a ser peligroso para el propio animal al ingerir sustancias tóxicas como la lejía, o al masticar objetos, tales como cables, etc... Es un problema a tomar en serio, ya que con frecuencia se destruyen objetos que son manipulados muy a menudo por el dueño (llevan su olor).

Asiduamente la ansiedad por separación coincide con un cambio brusco de horario del dueño.

No se debe pensar en ningún momento que el perro intenta "fastidiarnos" sino que está sufriendo verdaderamente al no poder estar con los dueños; es decir, es exactamente todo lo contrario a lo que comúnmente se interpreta: el perro no es lo suficientemente independiente, necesita de nuestra compañía y sufre tremendamente con nuestra ausencia.

La ansiedad y el nivel de excitación alcanzan su grado máximo durante un tiempo concreto, y este va desde unos cuantos minutos hasta una hora después de la partida del dueño.

Además de las conductas que hemos señalado, también pueden aparecer otras tales como hipersalivación, diarrea y automutilación.

Por lo general estas conductas indeseadas aparecen cuando el perro no tiene acceso al dueño y no en su presencia. Aún así también se pueden presentar estos problemas cuando el dueño está en casa y no atiende debidamente al animal.

Los signos externos de la ansiedad por separación que manifiesta el perro pueden ir desde la inquietud y gimoteo cuando el dueño se prepara para irse hasta verdaderas señales de depresión tumbándose taciturnamente en ciertos rincones de la casa.

El pronóstico será muy favorable si el problema es entendido correctamente por el propietario y si pone los medios adecuados.


Veamos los pasos que se deben seguir cuando aparece este problema en nuestro perro:

- Nuestro perro debe ser independiente. Debemos ejercitar con él desde muy temprana edad con simulacros, el ejercicio de "quieto" ante la presencia y ausencia del dueño. Cuando no se ha hecho esto desde el principio o cuando el propietario desconoce cómo, lo correcto es ayudarse de un profesional.

- El perro no deberá obtener atención por exigencia. Cuando el animal consigue atención (caricias, comida, paseos...) gimoteando, empujando con el hocico, dándonos con la pata, etc., es mucho más probable que se muestre ansioso cuando esté solo y no pueda conseguir atención. No se deberá prestar atención por exigencia del animal, sino siempre según criterio del propietario (siempre y cuanto desee).

- El ejercicio físico intenso tiene casi siempre un efecto muy positivo. Es más fácil que un perro agotado descanse y muestre menos conductas indeseadas, ya que sus niveles de ansiedad serán más bajos. Después del ejercicio se deberá dejar que el perro se tranquilice durante media hora antes de que el dueño abandone la casa.

- Es necesario estimular al perro correctamente. Si el animal tiene algo que hacer cuando está solo, estará también más entretenido y, por tanto, menos ansioso. Existen muchos juguetes alternativos para este tipo de problemas de comportamiento, por ejemplo el llamado "Kong". También se le pueden dejar trozos de comida sumamente apetecibles debajo de alguna escudilla o en juguetes diseñados para tal fin, de los cuales es difícil extraer el alimento.


- En alguna ocasión un segundo animal de compañía será muy beneficioso.

- El adiestramiento en obediencia es sumamente importante siendo como dijimos anteriormente el "quieto" y alejamiento del dueño el ejercicio fundamental.

- Existen otros ejercicios de obediencia que se tendrán que hacer por toda la casa: "sentado" y "quieto" y "tumbado" y "quieto" se deberán practicar frecuentemente dentro de la vivienda, exigiendo del perro que cada vez el tiempo de estancia solo y "quieto" sea más largo, pudiendo permanecer incluso durante una hora o más.

- Si durante la partida del dueño se encierra al perro en una determinada habitación será aquí donde se hagan más sesiones de la obediencia arriba indicada, y también donde sucedan las cosas más agradables para el perro, como la comida, sueño, juego...

- Es necesario que el perro desasocie la partida del dueño con ciertas señales, ya que estas señales visuales o acústicas empezarán a generar ansiedad al ser para el perro la ausencia del dueño inminente.



Se debe por lo tanto desensibilizar al perro ante estas señales. El procedimiento será el siguiente:


Cuando el dueño esté en casa, coger, por ejemplo, las llaves para dirigirse a cualquier punto de la casa, ponerlas encima de una mesa, estantería, sobre las piernas, etc. Esto se debe hacer con todos los objetos que signifiquen para el perro señales previas de la partida de su dueño. Hacer lo mismo con el abrigo, bolso, portafolios, zapatos, etc...

Se debe reproducir fidedignamente el escenario que ve el perro antes de la partida de su dueño sin que ésta se produzca.

También se desasociarán las señales de calma, es decir, la comida, el juego y el descanso no significarán necesariamente la presencia del dueño.

Se procederá a desensibilizar al perro frente a estas señales de la misma manera que en el caso anterior.

Encerrar al perro en una jaula para prevenir los destrozos, ponerle el bozal, o atarle, no harán más que agravar la situación, ya que la ansiedad se multiplicará. El castigo nunca fue un tratamiento eficaz en las terapias de comportamiento y mucho menos en el caso de la ansiedad por separación.