Mientras está ocupado decorando, cocinando y envolviendo los regalos de Navidad, debe tener cuidado con sus mascotas. Los animales se pueden sentir tentados con las llamativas decoraciones, los coloridos papeles y, sobre todo, la sabrosa comida de la época festiva.
Sin embargo, por más inofensivo que parezca, muchas de las decoraciones e incluso los alimentos, pueden representar un peligro para su mascota. La veterinaria Carmela Stamper, nos explica cómo proteger a nuestros familiares de cuatro patas.
Si su perro recibió golosinas como regalo, asegúrese de que no las devore todas de una vez. Según la doctora, si se traga los dulces enteros o come demasiados de una vez, es posible que no pueda digerirlos. Los dulces para mascotas pueden atorarse en la tráquea o en el tracto digestivo, sobre todo en los perros más pequeños.
Si un hueso o juguete para masticar se aloja en el estómago o en los intestinos de su perro, los síntomas podrían no presentarse de inmediato. Es posible que días u horas más tarde, vomite y presente diarreas, se muestre menos activo, no quiera comer y sufra dolor de estómago. Si la obstrucción dura demasiado tiempo, su perro puede enfermar de gravedad. El peor de los casos es cuando se produce una perforación en el lugar de la obstrucción, causando una infección potencialmente mortal.
Por otro lado, al decorar su árbol y al envolver o desenvolver los regalos, no pierda de vista dónde deja los adornos con escarcha, los cordones y las cintas. “Su gato puede encontrar estas decoraciones irresistibles porque parecen presas brillantes, serpenteantes y fáciles de atrapar. Si los ingiere, puede causar daños estomacales e intestinales de carácter grave”, explicó Stamper.
De igual forma, si tiene plantas navideñas como las pascuas, tenga mucho cuidado, porque a su gato o perro se le puede antojar comerlas. La doctora advirtió que las hojas de la flor de pascua pueden irritar la boca y el estómago de la mascota, causando vómitos y diarreas.
“Si su mascota se merendó las hojas de una nochebuena, usted puede ayudarle retirando sus platos de comida y agua por un par de horas para permitir que su estómago se asiente”, recomendó.
Por su parte, el Centro Nacional de Toxicología Animal (Napcc, por sus siglas en inglés) señala que las principales sustancias tóxicas que se encuentran en las plantas de decoración navideña, afectan el corazón, reduciendo la presión arterial y la frecuencia cardíaca.
Mientras, la veterinaria añadió que es necesario resistir la tentación de darle a su mascota sobras de la mesa con un alto contenido de grasa, como la manteca de la carne o la piel del pavo o pollo horneado. “Además del típico malestar gastrointestinal, los alimentos pesados y grasosos pueden causar una enfermedad potencialmente mortal y dolorosa llamada pancreatitis. Los síntomas más comunes en los perros incluyen vómito, dolor de estómago, agitación, temblores, diarrea, fiebre y debilidad. En los gatos son más difíciles de identificar”, previno Stamper.
También, debe tener cuidado con lo que tira a la basura. Los perros son famosos por sacar los restos o los huesos de la basura. Al igual que las golosinas en cantidades exageradas, los huesos pueden atorarse en el esófago o la tráquea del canino. Los trozos de hueso afilados también pueden lastimar la boca, el esófago y el estómago, causando lesiones internas graves.
El chocolate también puede ser peligroso para sus mascotas. Luego de comerlo, algunas presentan complicaciones más graves, incluyendo insuficiencia hepática, trastornos hemorrágicos y la muerte. La toxicidad del mismo depende del tipo y la cantidad que su perro haya consumido, de su peso corporal y de si es muy sensible al compuesto tóxico llamado teobromina.
Igualmente, si ingiere alimentos que contienen xilitol, encontrado en alimentos como los caramelos, chicles, mantequillas de maní, productos de repostería y productos de higiene personal, se verá afectado.
“Los síntomas se presentan rápidamente después de que un perro consume productos que contienen xilitol. El vómito es por lo general el primer síntoma, seguido de otros relacionados con la súbita reducción en el nivel de azúcar en la sangre de su perro (hipoglucemia), tales como una disminución de la actividad, debilidad, paso tambaleante, falta de coordinación, caídas y convulsiones”, comentó.
Por último, si ingieren alcohol, dependiendo de qué tanto sea, pueden presentar problemas graves. Los síntomas más comunes relacionados con el consumo de bebidas alcohólicas en las mascotas son vómitos, diarreas, falta de coordinación, debilidad, disminución de la actividad, dificultad para respirar y temblores. En casos severos, puede presentarse un estado de coma y la muerte por fallo respiratorio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario